Importancia del Kata en el Karate

La importancia de los katas

Importancia del Kata en el Karate. En primer lugar recordaremos el significado del término kata dentro del ámbito del Karate: ”Un kata es un modelo de movimientos que contiene una serie de técnicas lógicas, prácticas y ordenadas” que se realiza individualmente.

Los katas de Karate han sido creados por diversos maestros tras muchos años de investigación y entrenamiento.

Antiguamente los katas constituían prácticamente la única forma de aprender el arte. A través de ellos el practicante aprendía las técnicas, los movimientos, las esquivas, los giros etc. Tal era su importancia que los maestros utilizaban la frase “Hito kata san men” traducido literalmente como “un kata en tres años”. Sosai Mas Oyama se refería a los katas como la madre del Budô Karate. Recomendaba su práctica con la máxima rigurosidad ya que tradicionalmente éstos constituían prácticamente la única forma de transmitir el arte.

Sosai Masutatsu Oyama, sostenía que sólo con la repetición continuada y metódica de un mismo kata puede este ser comprendido y quedará correctamente asimilado tras unas tres mil ejecuciones realizadas.

Hanshi Steve Arneil (10º Dan Kyokushin) indica que en el Dojo de Sosai, el kata era utilizado como una parte integrante de la formación y que fue fundamental durante su preparación para superar la prueba del hyakunin kumite (100 combates) que realizó en el año 1965. Los contempla como una herramienta de formación única; entrenando kata de manera rigurosa y disciplinada ayuda a conseguir una mente fuerte y abierta, ayudando al fortalecimiento y flexibilidad del cuerpo.

El Maestro Morio Higaonna del estilo Goju-ryu, aún va un paso más allá y sostiene que la verdadera esencia y espíritu del Karate están en el kata y solamente mediante su correcta práctica podemos llegar a entenderlo. Por esta razón, si modificamos o simplificamos el kata para adaptarlo al principiante o para organizar torneos, se pierde también el verdadero espíritu del Karate.

Su evolución

Si bien la expansión del Karate se debe en gran medida a los japoneses, no debemos olvidar que el Karate es de origen Okinawense. La influencia de las artes marciales chinas en la aparición de los katas en el estilo de Okinawa es incuestionable. El propósito que se persigue en el desarrollo de los katas ha ido variando según la época. Recordemos, por ejemplo, que en china los monjes budistas los practicaban para fortalecer el espíritu y el cuerpo.

Existen distintos estilos de lucha chino, con sus katas o Taos, basados en las cualidades de diferentes animales. Destacar el puño del dragón, el puño del tigre, el puño del leopardo, el puño de la serpiente o el puño de la grulla, disponiendo cada uno de ellos de sus propias formas que influyeron sobre el desarrollo del Karate Okinawense.

Los Taos Chinos son de mayor duración y aparente mayor complejidad que los katas okinawenses. Estos últimos fueron aparentemente simplificados, acortados y adaptados por los maestros autóctonos en busca de una mayor eficacia y sencillez de transmisión.

Esta simplificación y adaptación de los katas ha continuado a lo largo de los años. La proliferación de estilos ha hecho que cada escuela los modifique en mayor o menor medida a criterio a su fundador.

El Maestro Anko Itosu (1832-1915), uno de los maestros de Gichin Funakoshi (1868-1957) considerado padre del Karate moderno, creó los katas Pinan, extrayéndolos de los katas Passai y Kushanku, para facilitar el aprendizaje de las técnicas fundamentales del Karate.
Tras la entrada del Karate en Japón estas adaptaciones continuaron, afectando incluso a la modificación de la nomenclatura de algunos katas; por ejemplo, Pinan se cambió por Heian, Saiha a Saifa o Kushanku por Kanku.

Clasificación

Ya que no existe un criterio único, nos basaremos en un par de criterios para clasificar los katas: según su origen territorial y en función de su concepción.

En primer lugar nos fijaremos según su origen territorial. Como es bien sabido, en los inicios del Karate (To-de), en Okinawa, éste se entrenó en tres zonas distintas, en las ciudades: Shuri, Naha y Tomari.

Los katas originarios del Shuri-te se distinguen por sus desplazamientos largos y flexibles, son rápidos y potentes y normalmente con respiración normal. Sin embargo, los katas del Naha-te acostumbran a ser más lentos y con posiciones muy sólidas combinando la potencia y la suavidad.
En función a su concepción podríamos clasificarlos en tradicionales y modernos. Los katas modernos carecen del espíritu bushi, y de contenido ‘okuden’(transmisión secreta y oculta). En ocasiones se observa que se ejecutan con un espíritu deportivo buscando una interpretación exterior por encima de una vivencia interior. En contraposición a éstos encontraríamos los katas tradicionales.

De estos últimos algunos autores definen los Koshiki-no-kata (katas primitivos) como aquellos katas de Karate creados antes del S.XIX y que, aún adaptados, mantienen algo más evidentes sus vínculos con los Taos chinos y cuya concepción está influenciada por el pensamiento chino.

Progresión, el aprendizaje SHU-HA-RI

El proceso de aprendizaje del Karate y por extensión de los katas se puede dividir en tres fases: una primera fase denominada “SHU” que se basa básicamente en la ejecución técnica –imitación del movimiento sin cuestionarlo– donde se aprende rápidamente pero sin profundizar en el significado de éste; una segunda fase denominada “HA” en la que se realiza un análisis de cada secuencia y se adquiere consciencia del movimiento que se está realizando; y una tercera y definitiva fase “RI” en la que el practicante evoluciona solo, sin maestro.

El practicante vive el kata hasta el punto de olvidar los movimientos sucesivos y sencillamente permitiendo que éstos se produzcan.

Durante el periodo de aprendizaje de los katas existen varias fases que se deben ir superando paulatinamente para su correcta asimilación. A continuación las enumeraremos utilizando terminología occidental:
• Posición: es imprescindible que el practicante conozca perfectamente las posiciones de Karate incluidas en cada kata.
• Equilibrio: debe controlarse el equilibrio en todo momento, tanto en las posiciones estáticas como en los desplazamientos y transiciones.
• Coordinación entre las posiciones, transiciones y correcta ejecución técnica.
• Forma: se debe conseguir una forma correcta ejecutando las técnicas en perfecto equilibrio y coordinación.
• Velocidad: el practicante puede incrementar el ritmo de la ejecución sin perder la forma.
• Potencia: incremento de la potencia y focalización en el punto apropiado.
• Reflejo: una vez superadas las fases anteriores y tras infinitas repeticiones, el practicante interioriza los movimientos haciendo que se conviertan en movimientos naturales.

En este proceso debe avanzarse sin prisas y, en la medida de lo posible, intentando asimilar cada fase correctamente.

Si se avanza al siguiente estadio sin haber entrenado suficientemente su predecesor, no se conseguirá una práctica satisfactoria y llegaremos al último estadio, al que hemos denominado Reflejo, con una memoria muscular incorrecta y posiblemente plagada de deficiencias.

Ejecución de los katas de Karate

En el Karate moderno hay unos fundamentos comunes, arbitrariamente aceptados, que se consideran importantes y a los que siempre se debe prestar atención durante la ejecución de los katas.

Entre estos destacaríamos: Forma, Equilibrio, Respiración, Fuerza, Ritmo, Vivencia, Mirada y Zanshin. El gran Maestro Masutatsu Oyama destacaba tres principios clave que hay que dominar para la correcta ejecución de los katas:

1. Hongi 本義 la Intención del creador del Kata, aquí hay que tener en cuenta que la mayoría de creadores de los katas no dejaron escrito sus aplicaciones y hoy en día están todos muertos con los cual la aplicaciones que se realizan son fruto de la suposición.
2. Ikkan 一貫, Consistencia o Coherencia en cuanto a los movimientos, combinación de estos de forma fluida, lo que influye en el ritmo de ejecución natural, no sincopado, del Kata.
3. Kotai 個体, la Solidez o Integridad Estructural del Kata.

Sosai Mas Oyama se refería a los katas como la madre del Budo Karate. Recomendaba su práctica con la máxima rigurosidad ya que tradicionalmente estos constituían prácticamente la única forma de transmitir el arte.

SOSAI MAS OYAMA FUNDADOR DE KYOKUSHIN (1923-1994)

 

Shuseki Pere-L. Beltrán, Novembre-2024
ペレ・ベルトラン
Mas Oyama’s Kyokushin Shibucho
Presidente de la Seishin Kyokushin Org.

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