KORYU Y GENDAI
KORYU Y GENDAI. Los artistas marciales necesitan comprender la historia de lo que realizan para poder tomar el lugar correcto en el presente y proyectar acertadamente el futuro. Empecemos por resaltar que nuestra disciplina no es un deporte de contacto, aunque existe una faceta deportiva. Es Budo.
Budo es un término que antiguamente abarcaba mucho más que las técnicas de lucha, comprendía también temas de filosofía, normas éticas y morales, de etiqueta, etc. El kanji Bu武 se construye con dos caracteres que significan:
止 “tome/dome” (parar) y 戈“hoko” (lanza), o sea “parar la lanza”. Representa a un guerrero destinado a luchar para frenar la violencia. El Kanji “Do”道 significa “camino” y representa la corriente filosófica y espiritual taoísta china, y se ha extendido para incluir a otras corrientes.
ElBudo se divide en dos períodos históricos: Ko-ryu Budo古流武道(“Escuela Antigua” de Budo) y Gendai Budo現代武道(“Moderno o Era Moderna”de Budo), reservado para las artes surgidas desde el Siglo XIX en adelante, lo que nos incluye a la inmensa mayoría de los practicantes modernos: Karatekas, Aikidokas, Judokas, Kendokas, etc.
En las épocas del Ko-ryu Budo, y hablando estrictamente de Japón, las disciplinas de combate eran enseñadas en academias con vistas a generar guerreros que sirvieran al señor feudal. De hecho, eran mantenidas económicamente por el feudo y por algunas familias nobles.
No se aceptaba al público en general y el entrenamiento estaba totalmente dirigido a desarrollar técnicas para aniquilar al adversario.
Mientras que nuestra idea de defensa personal actual o moderna se basa en la premisa de que podemos ser atacados por unos pocos oponentes sin contar con ningún tipo de protección ni armas, estos hombres entrenaban para enfrentarse munidos de su armadura y armas, contra otros en condiciones similares y probablemente para luchas en equipo.
De estas épocas viene el concepto de Ichi Geki Hissatsu一撃必殺 (“un golpe, una muerte”), ya que se buscaba la mayor efectividad en lo que el guerrero debía hacer: matar al oponente. Y tal como iban a la lucha preparados para matar de este modo, también se preparaban profundamente para morir así de rápido.
Las eras se fueron sucediendo… y el mundo cambió rotundamente. Tras la reforma Meiji en Japón, en 1968, las familias que sostenían estas academias de artes de guerra dejaron de percibir sustento de sus antiguos patrones. La modernización incluyó ejércitos que disponían de nuevas tecnologías que podían ser operadas por reclutas con menor formación en el campo de batalla. Fusiles y cañones dejaron obsoleta a la katana.
Los sistemas de combate que tantas generaciones fueron manteniendo para preparar Samurais, ahora no tenían lugar en el nuevo mundo. Las academias debieron reconvertirse para sobrevivir, y las artes marciales se fueron estructurando con vistas a recibir un público diferente. Comienza la era de las Gendai Budo.
Japón vio como arribaban maestros de Karate desde Okinawa que se encontraban predispuestos a trabajar en enseñar su arte al nuevo mundo.
Casos paradigmáticos fueron el de Anko Itosu (1830-1915) denominado el Abuelo del Karate Moderno, uno de los fundadores del Karate de Okinawa y quién creó los katas Pinan para facilitar su enseñanza en escuelas, y uno de sus alumnos más destacados fue Gichin Funakoshi, denominado el Padre del Karate Moderno, que en 1917 logró mostrar el Karate de Okinawa en el Butoku-den de Tokyo e integrarlo en el sistema educativo oficial y se apoyó en dicha estructura para difundirlo en todo el país.
Los maestros de Budo pasaron de formar guerreros a enseñar a niños escolares, estudiantes del ciclo superior y público en general. El cambio no fue meramente técnico, algo cambió en la esencia.
El nuevo Bushi武士 (Guerrero), al igual que el anterior, es un hombre o mujer que lucha por dominarse y perfeccionarse a sí mismo a través del arte del combate. Pero la diferencia es que ahora no luchará en equipo, no irá tras el comando de un jefe, no tendrá armadura ni arma… y el oponente se transformará en algo mucho más abstracto.
Si bien la idea de la máxima sigue siendo“un golpe, una muerte”, ahora deberíamos cambiar ese “Hissatsu” de “muerte” por“definitivo” con la idea de que llegado el momento el enfrentamiento no es un juego y hay que tratar dejar fuera de combate al oponente. Sería una tragedia formar ciudadanos que, para defenderse de un peligro, o incluso sólo de una ofensa, produjeran daños irreparables con tanta facilidad. Sólo pensar en las pesadillas legales que afronta una persona que se excede al ejercer el derecho a legítima defensa ya da pavor. Se hace énfasis en la prevención, en moderar la violencia, buscar preservar la vida propia sin tomar la del agresor, siempre que eso sea posible.
¿Y entonces cuál es la finalidad las Gendai Budo?Al igual que nuestros antecesores, entrenamos para la vida. Solo que ahora no tenemos oportunidad de contrastar el valor de la vida en un campo de batalla, y debemos poner a prueba nuestras habilidades en ámbitos diferentes: el stress de un agobiante trabajo de oficina, la inseguridad producida por la delincuencia, las amenazas de una salud frágil, y otros avatares de la vida moderna.
Afortunadamente existen, para aquellos que lo desean, los eventos deportivos para “medir sus progresos en combate” de forma segura con un igual y poder encontrar un modo más de perfeccionar nuestras habilidades, existen además infinidad de seminarios, exhibiciones y toda clase de celebraciones que permiten a los practicantes de Gendai Budo olvidar el mundo cotidiano y dedicarse de lleno a esta actividad que representa un hobbie para algunos, un estilo de vida para otros.
¿Se pueden generar guerreros tan poderosos como los de Koryu Budo? Ahh… eso ya es harina de otro costal.
Osu!!
Pere Beltrán,Març-2024
ペレ・ベルトラン
Mas Oyama’s Kyokushin Shibucho
Presidente de la Seishin Kyokushin Org.